El Saqueo empobrecedor es viabilizado por el
Terrorismo de Estado Los diccionarios de la lengua, definen “masacre”, como
“carnicería de personas inocentes”. Esa matanza de gente, también puede estar
causada por aspectos socio-económicos, atribuibles al desenvolvimiento de
políticas oficiales inherentes al sistema social capitalista y al régimen
político neoliberal vigente.
PIER PAOLLO BALLADELLI, representantes en
Colombia de la Organización Mundial de la Salud “OMS” y de la Organización
Panamericana de la Salud “OPS”, recientemente denunció: “Entre el 20 y 25% de
las muertes en Colombia dependen de factores ambientales. Estamos hablando de
49.000 muertes por año. Estas son las enfermedades cardiovasculares y las
enfermedades respiratorias crónicas, por contaminación del aire. También tenemos
enfermedades como diarrea e infecciones gastrointestinales que dependen de la
mala calidad del agua y del saneamiento básico, en especial en las zonas más
pobres del país donde tienen un impacto muy elevado”.
El Procurador General,
Edgardo Villanzón, hace poco, denunció la muerte anual de 20.000 niños
colombianos, causada por la falta de agua potable. También ha sido noticia
fugaz, la muerte de niños y adultos por desnutrición, “paseos de la muerte”(se
pasean a los moribundos en ambulancias o vehículos, de hospital en hospital, sin
encontar hospital que les abra las puertas porque los enfermos no tienen como
pagar el ingreso hospitalario, así el sistema hace morir en agonías atroces a
miles de Colombianos al año...) , mueren también miles por deficiente atención
médico-hospitalaria.
NO es hipérboles, estimar esta matanza silenciosa y
silenciada, en más de 6.000 personas mensuales o 200 por día. Cifra superior a
las bajas diarias sucedidas en las guerras neocoloniales contra Iraq y
Afganistán. Demuestra que el componente “social” del conflicto interno, es más
responsable de las muertes acaecidas que, el choque armado, entre fuerza pública
e insurgencia.
La oligarquía entronizada y atornillada en el Poder,
secularmente ha probado tener alma de piedra, al ser insensible ante el
padecimiento del esclavo, del indígena, del siervo de la tierra, del artesano,
del proletario y pueblo en general. Nada los conmueve, mientras no afecte su
patrimonio.
La ejecución del presupuesto nacional indica, fehacientemente
que, su más alto porcentaje, está asignado para gastos de guerra y represión
antipopular. Las partidas asignadas para agua potable, alcantarillado, vivienda,
educación, salud y prevención, NO guardan proporción en relación con la
prioridad y necesidad que tienen para salvar decenas de vidas humanas que se
pierden diariamente.
En desarrollo de sus políticas sociales carniceras, este
gobierno aceleró la privatización nacional de los Hospitales, con la respectiva
masacre laboral de empleados públicos y trabajadores oficiales. Reforzando así,
las condiciones para incrementar la prosperidad de los negociantes de la salud,
sin importarle la elevación al cuadrado de la defunción de humildes compatriotas
de todas las edades y género.
La secretaria de salud de la gobernación del
Atlántico, ROCIO GAMARRA, anunció la liquidación de 26 hospitales, por tener
“desequilibrio entre los ingresos y el dinero que comprometen”. Similar
justificación presenta el alcalde de Barranquilla, el delfín ALEX CHAR, para
liquidar “Redehospital” desde septiembre 1º; privatizar los servicios médicos
brindados en 48 puestos de salud y 5 hospitales; y, deshacerse de 1300
trabajadores.
Al gobernador Eduardo Verano y el alcalde Alex Char (como
buenos neoliberales uribistas), no les interesa un bledo la vida del pueblo que
los eligió, ni la suerte de los trabajadores arrojados brutalmente a la
calle.
Les importa quedar bien con su Presidente, los patrocinadores
políticos y sus socios de pillerías.
volver